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RECUERDO VIVO
Monumento a las víctimas del terrorismo / Madrid
Los recuerdos son entes vivos, que nos trasladan a momentos del pasado pero que en su evocación influyen acontecimientos, sensaciones o reflexiones ocurridas después de que lo recordado sucediese.
Esta circunstancia hace que los recuerdos puedan ir evolucionando en el tiempo, matizándose, sin dejar de ser reales y ciertos en cada momento, pese a ir cambiando.
Por eso Recuerdo vivo es una obra que se manifiesta de forma diferente según desde donde sea percibida y en qué momento se haga. El dónde y el cuándo influyen en su percepción. Es real y cierta en cada momento y lugar, pero cambia sin dejar de ser verdadera.
Esperamos que el acercamiento a experimentar Recuerdo Vivo sirva para reflexionar sobre la forma que tenemos de relacionarnos con los recuerdos y la forma que tenemos de relacionarnos con conceptos como la verdad y la memoria.
Para materializar estas ideas optamos por un único elemento agrupado, y multiplicado de forma ordenada. El color y la luz son los elementos que generan complejidad en el sistema. Esta elección quiere transmitir que los recuerdos son igual de válidos independientemente de la persona y que es simplista y conflictivo reducirlos a una única visión.
La elección del color se hace buscando la mayor simplicidad posible, por ello se opta por los colores de la cuatricomía (cyan, magenta, amarillo y negro) para que sea su interacción espacial y lumínica la que genere la multitud de colores presentes en la obra.
El color sólo aparece en el interior, quedando las caras exteriores en blanco. Esto se hace para expresar dos ideas; la primera es que los recuerdos, aunque los compartamos, forman parte de nuestro mundo íntimo y es en nuestro interior, mientras recordamos a las personas queridas, cuando las devolvemos a la vida, por eso los colores vibrantes y cambiantes. La segunda, el blanco del exterior para hacer referencia a la inocencia de estas personas, de cualquier persona que pierde la vida por el sinsentido de pretender imponer una idea por la fuerza.
Queremos hacer un homenaje a las vidas de las personas fallecidas. Con esto no queremos negar el dolor ni la ausencia, estos son reales.